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5 de abril de 2011

La cocina de siempre (libro).



Hoy ha caído en mis manos un libro llamado “La Cuina Gironina” escrito en catalán. En castellano sería “La cocina Gironina” (de Gerona). El autor es Jaume Fabrega. Es un libro que data del año 1985. Este fin de semana lo he estado ojeando, y la verdad casi se me saltan las lágrimas. Es la cocina con la que me he criado yo. Son platos típicos de mi zona, explicados de la misma forma que lo harían mis abuelas. ¡Nada de sopas de sobre ni productos raros! (Que conste que no tengo nada en contra de las sopas de sobre, más de una vez me han sacado de un apuro).
Como estaba diciendo, este libro me ha recordado que aquí en Cataluña, como en otros lugares, tenemos nuestra cultura, nuestras costumbres y nuestra cocina.  Y aunque hoy en día estemos viviendo una globalización, creo que nadie debería perder sus raíces. Porque cada lugar es distinto y tiene su encanto. Esta muy bien que cocinemos couscous, sushi,... o que comamos hamburguesas con ketchup,... però sin olvidarnos que aquí en España, tenemos una gran cultura gastronomica.

En general me encanta la cocina, y más la de mi tierra, pero tuve la mala suerte que mi madre no me enseño a cocinar, y mis abuelas ya son mayores para enseñarme, aunque no me puedo quejar porque siempre tienen algún que otro truquillo, y buenos consejos que dar. Pero siendo realista, creo que nunca cocinare tan bien como mis abuelas, jejejeje.
Y es que las abuelas tienen ese toque especial, que supongo que será un poco de amor, una pizca de experiencia  y unos gramos de paciencia, que hacen de sus comidas un manjar exquisito.
Se podría decir que cuando era pequeña me críe en casa de una de mis abuelas, la que fue cocinera, y tanto para comer como para cenar siempre éramos unos cuantos, ella siempre te preguntaba que querías y tenia la paciencia de preparar un plato distinto para cada uno, menos las fines de semana o fiestas que todo el mundo se ponía de acuerdo, y comiamos ese arroz a la cazuela tan típico de ella, y típico de nuestra zona del “Baix Empordà”. Era un arroz oscuro, pero el truco no era ponerle tinta, sino sofreír muy bien la cebolla, así conseguía un arroz muy oscuro y muy gustoso. Otro pequeño truco, es utilizar ingredientes de calidad, como por ejemplo arroz de la zona de Pals, que lo tenemos aquí al lado y es un arroz excelente.

Hablando de ingredientes de calidad, mi otra abuela que vive en el campo, cría  pollos, gallinas y tiene su huertecito, con sus arboles frutales. Casi todo lo que cocina, lo hace con sus productos. La mayoría de los días como y ceno allí, y nunca en mi vida pensé que me iba a gustar tanto la verdura, pero es que tiene otro gusto. Dos días a la semana, cocina la típica “Escudella y carn d’olla”, que es parecido al Cocido Maragato de León. Un día a la semana hace arroz a la cazuela, pero su arroz es bien distinto de mi otra abuela, no le queda tan oscuro pero ella hace un sofrito de cebolla y le pone solo un trozo de pollo por persona, (solo le pone sepia en días de fiesta) y con eso tiene suficiente para darle mil gustos, ¿me pregunto cómo lo conseguirá?

El otro día nos preparo col con butifarra de perol, otro plato típico de Cataluña. O las patatas a la cazuela con cebollas y anís, uno de mis preferidos. Pero el día más esperado es el sábado, que suele preparar macarrones, pero ¡que MACARRONES! El truco de mi abuela es preparar la carne, poniéndole hígado de pollo y lo tritura todo muy fino, y ¡qué gusto más bueno le da! Tenéis que probarlo.




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